Este 28 de junio, día del Orgullo, ADI LGTBI+ celebra la aprobación en el Consejo de Ministros y Ministras de la nueva ‘Ley para la igualdad real y efectiva de las personas trans y para la garantía de los derechos de las personas LGTBI’ que unifica por fin los derechos del colectivo en todo el territorio nacional, y reconoce la libre autodeterminación de género librando a las personas trans de la patologización, no haciendo obligatorios los procesos de hormonación y sin necesitar un certificado médico. Además, esta ley deja de considerar enfermas a las personas trans y acaba con una injusticia y una discriminación históricas. La ley, que ahora tendrá que ser ratificada en Congreso y Senado, prohíbe las terapias de conversión y potencia la educación afectivo-sexual y de género.
Desde ADI LGTBI+ recordamos y lamentamos que la ley no resuelva algunos de los problemas a los que se enfrentan las personas LGTBI+ en el ámbito deportivo. Una vez más, reclamamos la urgente modificación de la Ley 19/2007 contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte para que incorpore también la erradicación de la homofobia, la bifobia y la transfobia de forma sistemática y profunda. También reclamamos que la nueva ley del Deporte reconozca y proteja los derechos de las personas LGTBI+ en este ámbito.
ADI LGTBI+ continuará trabajando y se sumará a las acciones de otras entidades del colectivo para seguir reivindicando el reconocimiento de las personas No Binarias, la eliminación del proceso judicial en menores trans de 12 a 14 años, el derecho de la infancia menor de 12 años a la autodeterminación de género (actualmente tan solo pueden registrar el cambio registral del nombre) o la ampliación de los derechos de todas las personas trans migrantes, con independencia de su estatus jurídico. Junto a la Asociación Deporte y Diversidad acudiremos a la manifestación estatal del Orgullo el próximo sábado 9 de julio bajo el lema «Tarjeta roja a la transfobia en el deporte», para visibilizar la necesidad de acabar con el estigma, la discriminación y las violencias que sufren las personas LGTBI+, y muy especialmente las mujeres Trans, en el deporte.